Crédito. La lista de Schindler.
Es una película
americana, del año 1993, basada en el Holocausto durante la Segunda Guerra
Mundial. Dirigida por Steven Spielberg, esta película refleja los años de horror
que sufrió el pueblo judío, especialmente en Polonia. La película trata de un
empresario alemán de ideología nazi, que monta una empresa de artículos de
cocina. Acuerda con el jefe de un campo de concentración llevarse mano de obra
judía del gueto. Al principio, se muestra como una persona avariciosa que sólo
se preocupa por sus propios beneficios. Sin embargo, a lo largo de la película
cambia y empieza a ser comprensivo y a preocuparse por sus trabajadores. Se da
cuenta de todo el sufrimiento por el que han pasado los judíos, y les ayuda a
sobrevivir. Para evitar que éstos vayan a campos de exterminio en 1945, tiene
que comprarlos, invirtiendo el dinero obtenido con la fábrica y arriesgando
miles de euros. Schindler consigue salvar muchas vidas, aunque se arrepiente de
no haber actuado antes, y así, haber salvado a más personas. En la emotiva escena
final aparece una gran cola de los familiares y descendientes de todos los
judíos a los que salvó colocando piedras, en señal de agradecimiento, sobre su
tumba.
Esta película es idónea
para hacerse a la idea de lo que los judíos vivieron en aquella época, la
catástrofe originada por una ideología extremista y totalmente inhumana. En mi
opinión, las ideas que sostenían los nazis eran totalmente inmorales, al ser
basadas en el racismo, el expansionismo territorial y el militarismo. El
nazismo y el fascismo son regímenes que no respetan valores como la libertad,
igualdad, cultura o raza del individuo. Bajo
mi punto de vista, los años del Holocausto fueron los peores sufridos por la
humanidad en mucho tiempo, puesto que, las medidas que se tomaron frente a las
razas diferentes fueron totalmente inadmisibles y atacan a todo valor moral. Esto
nos hace reflexionar sobre los límites de ira y ambición del ser humano. No
existe el respeto al hombre en la guerra, por ninguno de los dos bandos. Espero
que todo lo ocurrido en todas las guerras sirva para recapacitar y darnos
cuenta de lo que realmente es correcto o no, y de cómo podemos evitar tropezar
en la misma piedra.
Irene Sánchez Ben.
No hay comentarios:
Publicar un comentario